Economía

Reunión del G-20: Y volver, volver,…

volver a tus brazos otra vez, a escuchar cantos de sirena que me vuelven a embaucar, a hablar de supranacionalidad cuando quiero decir nacionalidad, a hablar de bien común cuando quiero decir mis propios intereses, volver, volver, y volver, a lo mismo, otra vez.

Volver a debatir sobre lo debatido, no es debatir, sino repetir, concluir lo ya concluido no es reflexionar sino aburrir, y reunirse para nada no es reunirse sino malgastar, me río yo de la austeridad cuando ahora resulta que el G-20 se reúne para lo mismo, lo mismo de siempre, para hablar de lo necesario que es tomar una salida conjunta a la crisis, todos de la mano, como buenos hermanos.

Volver a mentir, todos los dirigentes mienten, hablan de medidas comunes y luego se embarcan en guerra de divisas, ¡qué falta de memoria!, o de cultura, que es peor. Parece que estos dirigentes que hoy nos toca sufrir ya no recuerda los años 30 del siglo pasado, justo después de la gran crisis, la que dicen que se parece a ésta, pero no aprendemos, y quieren volver a hacer lo mismo. Tautología: mismas causas, mismas consecuencias.

Volver, volver, volver, a lucir palmito ante la prensa, a mostrar poderío ante el mundo, a fingir que todos son importantes cuando sólo (con tilde o sin tilde, tú eliges) uno lo es, sólo uno que los gobierna a todos, él devalúa y nadie hace nada, algunos hablan, pero nadie grita, nadie actúa, nadie se atreve a ir contra el hermano mayor.

Volver, volver, volver, volverán todos a sus países y hablarán del éxito de la reunión, como si todavía nos lo fuéramos a creer, volverán a cantarnos las bonanzas de estas reuniones, pero seguirán sin tomar la decisión que todos necesitamos: una organización supranacional con poder ejecutivo.

Pero nadie, ningún máximo dirigente está dispuesto a perder poder, iría contra su esencia, contra su alma, contra su manera de entender la vida, el poder es vida, el no poder es no vida, por ello seguimos condenados a políticas nacionales contra problemas supranacionales, en un esfuerzo fatuo que no nos lleva a ningún lugar más que al fracaso.

Sobre el autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.