Sociopolítica

Esquela a un luchador convaleciente

15/01/2013- Argentina

Esquela hacia el camarada.

Casa Leon Trotsky / Fuente: tintarojablog.wordpress.com

Mañana calurosa en Buenos Aires. Hoy es 14 de Enero de 2013. A partir de este momento, tendrá para mí, una importancia superlativa, como hacia resto de quienes lo conocen bien. La llama ardiente de un revolucionario nunca se apaga, siendo ejemplo de vida consecuente a su ideario, atizando los espíritus mas inquietos e incomodando a los cobardes que nunca desean salir de su estoica mediocridad.
Brotan de su boca la inolvidable frase de Bertolt Brecht, alentándonos a vivir cuando nuestro espíritu comienza a flaquear, logrando mantenernos en el “eje consecuente de la vida” :…”Hay hombres que luchan un día y son buenos. Hay otros que luchan un año y son mejores. Hay quienes luchan muchos años, y son muy buenos. Pero hay los que luchan toda la vida, esos son los imprescindibles.”

Nada, lo sintetiza y pinta en cuerpo entero a este luchador socialista, quien hizo de su vida la razón para pelear contra toda injusticia, hipocresía y mezquindad, como lo retrata en medida y estatura moral, el párrafo del dramaturgo y poeta alemán, quien pareciera habérselo dedicado a él en su exactitud.
Sepan disculpar señores lectores, si creen que refiero sobre un “prominente político”, o algún conocido héroe. De quien estoy escribiendo es de un trabajador – hombre, común, concreto y real- quien entre otras maravillosas enseñanzas, logró convencerme en descreer en cualquier tipo de idolatría, evitando de este modo los dogmatismos y mantener la independencia de consciencia. Creer en los trabajadores, como únicos sujetos de cambio social; el arma de la crítica: instrumento del conocimiento; la praxis, como transformador de la realidad; ser irreconciliable con la burguesía y el imperialismo, lo mismo que en la enemistad hacia el sistema capitalista, cuyas nefastas políticas conducen a la barbarie, el hambre y las guerras sin fin…
Nunca creyó en la mentira de la democracia burguesa, y ha sido por ello que siempre se ha granjeado el apodo de “contrera sistémico”. Sin embargo, aquellos que lo tildaron entonces como tal, son los mismos que cínicamente sucumbieron a los brazos del régimen burgués llenándose sus bolsillos, mientras el “contrera”, fiel a su consciencia, vive en la actualidad modestamente en términos económicos; con riqueza mental y mirada lúcida de quien nunca ha cedido su LIBERTAD: para él, lo más preciado en la vida es este valor como único bien incorruptible. ¡Vaya enseñanza!

Una vez me dijo: “…a veces hay que probar un poco de ácido en el río, para apreciar en su totalidad la importancia y lo imprescindible de la potabilidad del agua”, en referencia a los que naturalizan la estupidez y el tratamiento fatuo de la des-humanización (hambrunas, guerras, etcétera), donde los medios burgueses empeñan ríos de tinta, así como horas de comunicación radial y televisiva.

Su vara de medición no pesa en dinero, sino en toneladas de enseñanzas, humanismo y credibilidad intachable, siendo a través de su vida, donde forjó los dotes docentes de revolucionario internacionalista consecuente.

El no está sólo, hay millones de trabajadores mundiales que pensamos y padecemos igual o más que él…

La llama de la antorcha sigue mas viva que nunca. Millones la llevaremos con orgullo, hacia la victoria.

No diré ni siquiera su apodo, respetándole su principio de ser un trabajador mas…

¡Gracias por conocerte, compañero!

Sobre el autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.