Economía

Inmobiliarias digitales, ¿merecen la pena?

La tecnología digital avanza en todos los aspectos de nuestra vida para que la podamos aplicar en casi cualquier ámbito y en este punto, las inmobiliarias digitales no son una excepción abriendo un abanico de oportunidades en la compraventa de inmuebles a tan solo un clic. Vamos a ver en qué consisten y cuáles son sus ventajas respecto al modelo estándar.

Inmobiliarias digitales vs negocio inmobiliario estándar

Uno de los principales motivos que diferencian a las inmobiliarias tradicionales de las nuevas inmobiliarias low cost que están emergiendo a través de la red es el ahorro total en gastos y comisiones, pues la comisión de un inmueble por el proceso de compraventa tradicional a través de una inmobiliaria suele oscilar entre un 5% y un 10% del valor total. Mientras que en las inmobiliarias online se cobra un precio fijo por tramitación y gastos que se sitúa bastante por debajo de esa cifra.

Además de las altas comisiones que nos cobran las inmobiliarias de toda la vida, estas también hacen una diferenciación en las cuotas asignadas en función del tipo de vivienda, así como de otros factores implicados en la compraventa como por ejemplo, la ubicación, los honorarios de sus profesionales y las primas que son más elevadas generalmente en los inmuebles de segunda mano.

Otra de las ventajas que presenta este nuevo y renovado modelo de negocio respecto a la versión tradicional es el tiempo, pues la mayoría de gestiones se pueden realizar vía telemática agilizando el proceso y acortando el tiempo desde la exposición del anuncio en los diferentes portales de venta, de lo cual se encarga la inmobiliaria digital hasta que finalmente se cierra la transacción.

La mayoría de estas inmobiliarias emergentes en el sector financiero también ofrecen una garantía adicional al vendedor, puesto que el desembolso de gastos de gestión únicamente se produce si se ha conseguido vender la propiedad. El equipo de profesionales que se encuentra detrás de estos negocios se ocupa básicamente de todo de la misma forma en que lo haría una inmobiliaria estándar.

¿Dónde está el truco, porque las inmobiliarias online son tan baratas?

Como dirían nuestras abuelas “nadie da duros a cuatro pesetas” y en este punto, las inmobiliarias online no operan como ONGs ni nos ofrecerían estos servicios si ellos no obtuvieran la rentabilidad que todo negocio requiere para sustentarse, entonces ¿ dónde opera la rentabilidad de su negocio?

Como casi todo modelo de negocio que opere a través de Internet el principal ahorro por el cual puede ofrecer un mejor precio sus clientes manteniendo un cierto margen de beneficios se encuentra en la supresión de las infraestructuras. El mayor gasto de las inmobiliarias tradicionales se produce en el alquiler de locales y oficinas a donde los clientes acuden para vender su casa y son asesorados por el personal a los que también se le asigna un sueldo fijo, además de comisiones.

En el caso de las inmobiliarias online se centraliza la publicidad en los diversos medios telemáticos pudiendo llegar a más personas puesto que no se limitan a una ubicación específica. Esto también influye en la forma de contratación, pues aunque también disponen de un equipo profesional que obviamente cobra por su trabajo, su función no se limita únicamente a un área geográfica organizando así una red de teletrabajadores que complementan las funciones de oficina en la modalidad freelance completando muchas de sus tareas vía telemática.

Consideraciones finales, ¿son las inmobiliarias online rentables?

Aunque todavía se trata de un sector en desarrollo que se prevé que se expanda exponencialmente durante los próximos años, las inmobiliarias online han tenido un gran impacto en el mercado y una excepcional acogida entre los consumidores. Alguna de las inmobiliarias online más destacadas en el sector son Housell, Housefy y la española Lemonkey entre otras.

El promedio de ahorro que se estima en una transacción de la venta de una propiedad mediante una inmobiliaria online dependerá del valor de la vivienda y otros factores. No obstante, los expertos del sector calculan este promedio entre unos 8000€ y 20000 € por vivienda.

Sobre el autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.